Por Diario Barahona
Barahona, República Dominicana. – Sony Agustín es un joven barahonero que representa con orgullo el verdadero significado de la superación personal. Su historia comenzó en el mercado público de Barahona, donde desde muy temprana edad vendía fundas negras para aportar al sustento de su hogar y ayudar a su madre. Aquel niño, inquieto y con deseos de complacer caprichos infantiles sin dejar de ser responsable, ya mostraba señales de grandeza.
Sony no solo se destacó por su espíritu emprendedor desde niño, sino también por su habilidad con los videojuegos. Sin embargo, más allá de jugar, comenzó a reparar consolas, lo que lo impulsó a adquirir habilidades técnicas que más tarde lo ayudarían a diversificarse económicamente.
Con el paso del tiempo, Sony se convirtió en digitador. Frente a una computadora, fue desarrollando destrezas en la redacción de documentos y ofreciendo servicios a personas de distintas comunidades. Su talento no pasó desapercibido: cada vez más personas confiaban en él para realizar escritos, cartas, contratos y otros documentos legales.
Impulsado por su experiencia y por el deseo de seguir creciendo, Sony tomó la firme decisión de estudiar Derecho, carrera en la que demostró tener vocación y capacidad. Gracias a los conocimientos adquiridos y la experiencia práctica, hoy en día es un abogado reconocido y respetado por su ética, compromiso y espíritu servicial.
Sony Agustín no se detuvo en sus orígenes humildes. Hoy, con orgullo y determinación, se ha convertido en un ejemplo palpable de que la perseverancia, la humildad y el trabajo constante son las verdaderas llaves del éxito.
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